La expansión del transporte y las nuevas formas de movilidad en la CDMX están redefiniendo dónde y cómo se invierte en bienes raíces. Descubre qué zonas ganan valor y cómo adaptarse a este cambio.
La movilidad urbana es un factor determinante en la configuración del mercado inmobiliario de la Ciudad de México. La accesibilidad y la calidad de las infraestructuras de transporte influyen directamente en la demanda y el valor de las propiedades en diversas zonas de la ciudad.
Conectividad y valor inmobiliario
La accesibilidad es esencial en la valoración de una propiedad. Áreas bien conectadas mediante transporte público eficiente, ciclovías y vialidades adecuadas suelen experimentar una mayor demanda y plusvalía. Colonias como Del Valle, Ciudad de los Deportes y Nápoles destacan por su alta movilidad, lo que se refleja en el incremento de los precios de los inmuebles en estas zonas (Congreso CDMX, 2024).
Influencia de nuevas infraestructuras de transporte
La implementación de proyectos de infraestructura vial y de transporte público tiene un impacto significativo en el mercado inmobiliario. La construcción de nuevas líneas de metro, la ampliación de rutas de autobuses y la creación de ciclovías mejoran la conectividad de ciertas áreas, aumentando su atractivo para desarrolladores y compradores.
Tendencias actuales en movilidad y vivienda
El crecimiento de zonas bien conectadas y el auge de proyectos mixtos son tendencias destacadas en el mercado inmobiliario de la CDMX. Los desarrollos que combinan viviendas, comercios y oficinas en áreas con buena movilidad urbana son cada vez más populares, ya que ofrecen comodidad y reducen la necesidad de desplazamientos largos (CRMÉXICO,2022).
La movilidad urbana es un factor determinante en la configuración del mercado inmobiliario de la CDMX. La inversión en infraestructura de transporte y la evolución en las preferencias de movilidad de la población seguirán dando forma al desarrollo inmobiliario en la ciudad. Para compradores e inversionistas, entender estas dinámicas es clave para tomar decisiones estratégicas que maximicen la plusvalía y la calidad de vida.
Además, el crecimiento de la movilidad sustentable y la integración de nuevas tecnologías en el transporte podrían redefinir los modelos de desarrollo urbano en los próximos años. Aquellas zonas que logren adaptarse a estas transformaciones no solo serán más atractivas para los residentes, sino que también se convertirán en puntos clave para la inversión inmobiliaria a largo plazo.
