Nuestras inversiones deben ser atendidas con cuidado para poder evitar situaciones de pérdida como lo es la minusvalía. Si no ves un crecimiento en tus cuentas, puede que estés pasando por un proceso como este. Descubre cómo evitar estas situaciones aquí.
La minusvalía en finanzas se refiere a la pérdida de valor de un activo que está siendo utilizado para obtener un rendimiento o ganancia mediante un proceso de inversión. Esta pérdida de valor puede ser el resultado de un deterioro físico, obsolescencia técnica, o una disminución en el precio de mercado.
La importancia de la minusvalía recae en que ayudan a identificar qué inversiones no están funcionando como se esperaba. Por ejemplo, si un instrumento de inversión pierde valor, se pueden tomar acciones para mantener esa inversión o venderla.
Las minusvalías se reconocen efectivamente cuando, en un periodo determinado de tiempo, el monto total de la inversión presenta una pérdida de valor. Puedes identificar minusvalías realizando un comparativo entre estados de cuenta.
Es importante destacar que una minusvalía se convierte en pérdida en el momento en que vendes el bien o acción; mientras eso no suceda, el valor puede recuperarse. Las minusvalías pueden presentarse en todos los instrumentos de inversión, incluyendo divisas, acciones, y AFORE.
Algunas recomendaciones que puedes seguir para evitar la minusvalía en tus acciones son:
- Trata de ser objetivo: Es importante que conserves la calma y no tomes decisiones precipitadas cuando haya minusvalías en tus inversiones.
- No hagas retiros de tu cuenta: Evita hacer cambios radicales en tu cuenta o cambiar de Afore durante periodos de minusvalías sin conocer cómo este proceso va a impactarte.
- Continúa con tu plan de ahorro: Mantén tu plan de ahorro a pesar de las fluctuaciones del mercado.
- Esperar a vender: Si la pérdida es temporal, puede ser recomendable esperar a que el precio del activo se recupere antes de venderlo.
- Compensar las minusvalías: Si se han obtenido plusvalías en otras inversiones, se pueden utilizar para compensar las minusvalías y reducir el impacto en la cartera de inversión.
Para determinar si una inversión es segura se tienen que considerar varios factores. Primero debes preguntarte, ¿qué tanto estás dispuesto a arriesgar en una inversión? Si prefieres inversiones con menos riesgo, puedes optar por instrumentos de ahorro e inversión que son más seguros, como los Certificados de la Tesorería de la Federación. Antes de invertir, realiza una investigación exhaustiva sobre la inversión y la entidad financiera y no pongas todos tus recursos en un solo lugar para mitigar el riesgo. Además, debes estar seguro de que la entidad financiera esté regulada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) o por otra entidad reguladora reconocida.
Recuerda que ninguna inversión es 100% segura. Siempre existe un cierto nivel de riesgo, por lo que es importante estar bien informado antes de tomar decisiones de inversión.